La fuga o deambulación, es un importante problema de seguridad para las personas autistas u otras personas con diversidad funcional, sus familias y su entorno. Este término describe la tendencia de un individuo a abandonar la seguridad de un entorno y/o cuidador conocidos por ejemplo abandonar el hogar cuando nadie está mirando o escaparse del colegio. Debido a que las personas autistas a menudo tienen dificultades para comunicarse y ser conscientes de su propia seguridad, esta conducta puede ser particularmente peligrosa: pueden tener problemas para dar su nombre y dirección y en ocasiones, no son capaces de proporcionar información de contacto sobre sus cuidadores o no reconocer los peligros ambientales. Además, a estos niños y niñas a menudo les atrae por ejemplo el agua y el ahogamiento es una de las principales causas de muerte en la infancia con esta condición de desarrollo. Las encuestas en E.E. U.U. muestran que casi la mitad de los niños y niñas diagno...
Un blog dedicado a las personas dentro del espectro del autismo y a todo lo que las rodea